“Despierta nuestra alabanza y gratitud por cada ser que has creado, Señor.
Danos la gracia de sentirnos íntimamente unidos con todo lo que existe.”
(Oración por nuestra tierra – Papa Francisco)
Se habla, se escribe y se discute mucho sobre la pandemia del Coronavirus. Sin embargo, son pocos los que se preocupan por señalar nuevos caminos para una convivencia más humana y digna. El Papa Francisco, profeta de hoy, ya ha puesto en marcha un Proyecto “Covid 19 Construyendo un futuro mejor”. Para ello formó una Comisión y también convocó a un gran experto, el británico Martin Palmer, administrador de Faith Invest, grupo que une el mundo de las entidades religiosas con el de las finanzas. El secreto, según el Papa, es prepararse el futuro y no prepararse para el futuro.
Es interesante ver cómo las dos Encíclicas Evangelii Gaudium y Laudato Sì ofrecen elementos importantes para revertir la situación actual y crear un nuevo modelo de sociedad. Según Palmer, también nos hemos adaptado al sistema corrupto basado en la ganancia de las multinacionales y en los sistemas bancarios que llevaron al colapso.
Para llegar a lo nuevo, el secreto está en dar un paso atrás, como nos enseñó el Concilio Vaticano II, cuando pidió a los Institutos Religiosos que volvieran a sus propias raíces para entender cómo proceder en el futuro. Todos fuimos invitados a un estudio profundo de los orígenes para proceder con mayor autenticidad y seguridad en el futuro.
Es precisamente la receta que nos apuntan tanto el Papa Francisco como la Comisión: volver atrás, respetar la diversidad, la naturaleza, luchar contra la desigualdad de oportunidades, bienes, acceso a la salud, tecnología, educación, acogida de los últimos, construir un nuevo mundo de convivencia en el lugar donde nos encontremos. Valorar lo que tenemos en la comunidad y no caer en la ola del consumismo.
Nosotras, las Hermanas Benedictinas de la Divina Providencia, también somos centrales en este proceso, tanto en nuestras escuelas como en las diversas actividades de asistencia social y pastoral. Estamos llamadas a construir una nueva convivencia humana con una llave solidaria en la fe. El Papa Francisco dice: “La educación será ineficaz y sus esfuerzos serán estériles si no se preocupa en difundir un nuevo modelo en relación con el ser humano, la vida, la sociedad y la naturaleza” (n. 215 LS). Sin nuestro trabajo, aunque sea en silencio, sin apariencias, la sociedad civil ya habría entrado en colapso.
Aceptamos las enseñanzas del Papa Francisco con gratitud y fe. No debemos dejar pasar la oportunidad: la pandemia 2020 ha llegado a sacudirnos a cada uno de nosotros y a la humanidad de la explotación y el abuso de las cosas creadas y del dominio del poder. Somos llamadas a luchar contra todo tipo de pandemia. Una sociedad, una comunidad donde se respeta lo diferente es mucho más resistente que cualquier tipo de virus. “La crisis ecológica es un llamado a una profunda conversión interior” (n. 217 LS). Pensemos sobre eso.
Pensamientos de Vatican News – Hna. María das Dores Paz